Es raro la forma en la que el universo funciona, conspira. Ayer no tuve un gran día (desde que empezó el verano que no tengo "buenos días") no se si sera porque no tengo trabajo, porque no tengo amigos, porque estoy susceptible por la perdida de peso o por qué razón. Así que me levante de la cama (mi única compañera estos días) y me fui a la playa. Me compre una vieja amiga rubia y me senté en la arena a pensar, a no pensar, a respirar, a sentir algo, a buscar alguna señal de que todo iba a estar bien. Estuve 1 hora sentada contemplando el mar, y de repente se sentó a mi lado un chico senegales. Y empezamos a "hablar". Me contó que él tampoco tenia amigos acá, que estaba lejos de su país y su familia y que los extrañaba mucho. Me contó que sus hermanos estaban por el mundo y que era muy difícil que coincida toda su familia en un mismo país para alguna reunión. Estuvimos 4 horas hablando, compartiendo anécdotas, sueños, tiempo. Cuando nos despedimos me regalo un anillo y un reloj con la hora de Senegal y me dijo que no me sienta sola, que ahora tenia un amigo senegales que iba a pensar en mi en cualquier parte del mundo en el que este.
Esa fue la señal. Ese fue el universo conspirando para darme fuerzas. Ahora no me siento tan sola.
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